Cusco es más que una ciudad; es un viaje en el tiempo. Conocida como la capital del Imperio Inca, esta joya peruana te invita a explorar su rica historia y cultura. Camina por calles empedradas que te llevan a plazas llenas de vida, como la Plaza de Armas, donde podrás admirar la Catedral de Cusco y la Iglesia de la Compañía de Jesús. No te pierdas el Qoricancha, un templo inca cubierto de oro que ahora alberga un convento colonial.
Pero Cusco no es solo historia; también es una puerta a aventuras naturales. A pocos kilómetros, encontrarás el Valle Sagrado, con sus terrazas agrícolas y pueblos artesanales. Y, por supuesto, está Machu Picchu, una de las 7 Maravillas del Mundo Moderno. Ya sea en tren o a través del Camino Inca, llegar a esta ciudadela es una experiencia que cambiará tu vida.
La gastronomía cusqueña es otro punto a favor. Prueba el cuy al horno o la chicha morada y descubre sabores que no encontrarás en ningún otro lugar. Además, la ciudad ofrece una vida nocturna vibrante y una amplia gama de alojamientos, desde hostales hasta hoteles de lujo.
